Una de pintores: Electa, no Electra

Rafael Flores Hay quien vive rápido, intenso y corto, como un relámpago que ilumina todo y cuando nos damos cuenta, ya se fue. Así era Electa Arenal, que brincaba del tingo al tango derrochando energía y coloreando muros. A los seis años de edad ya andaba de pata de perro en la Unión Soviética. Su papá y su mamá, Leopoldo Arenal y Enriqueta Huerta, eran pintores y fundadores de la Liga de Escritores y Artistas Revolucionarios, fueron comisionados a asistir a un congreso en Moscú y se quedaron cuatro años…