Sólo se trata de celebrar el amor 

Beatriz Rojas Azúcar, flores y muchos colores abrieron paso al largo, larguísimo contingente de más de 10 mil. Todo un séquito para decenas de reyes y reinas que lucían sus coronas desde lo alto. Rodeados de papelitos de colores, banderas, romanos-ángeles, jugadores de pelota, una quiceañera, muchos lomitos, bebés, niños, adultos, un unicornio de petate y uno inflable, un priista, morenistas, perredistas, un dinosaurio, más perros, parejas, policías y un conejo.  -¿Y ésta qué significa?  – ¿Y cuál es la tuya?   – Pues no sé… No sé qué soy.  Antes…

Con zapatos Mickey

Livier Fernández Topete Para Yésica Negros, blancos o pintados de rosa. Aprendimos a caminar juntas, a trepar árboles y a colgarnos en columpios mientras soltábamos las amarras que entonces eran poquísimas; tú siempre fuiste más temeraria, yo a veces servía de sostén (entrelazando las manos o poniendo la espalda, por ejemplo) para tus malabares; las dos reíamos en cualquier caso. Si algo había que pintar de rosa, eso era la prenda que aseguraba nuestros pasos para ir descubriendo un mundo cada vez más y más colorido, donde el negro era…