Hacemos señales con humo

Livier Fernández Topete No importa cuán indirecta, frecuente o silenciosa sea; la muerte, cuando susurra apenas cerca de nuestro oído, no puede ser tan lejana, aunque finjamos locura, incluso si decidimos la indiferencia; porque indiferencia no es lo mismo que ignorancia; la primera (en el caso de la muerte) se parece más al adormecimiento, mientras que la segunda (en el mismo caso) es casi una imposibilidad. El final de una vida nos pone en contacto con la vida. La enfermedad, lo finito a secas, lo estéril, lo arrugado, el silencio,…