Livier Fernández Topete
Los enamorados de Scarlett Johansson no pueden perderse este largometraje en el que la actriz, modelo y cantante estadounidense, llena de vida y de muerte a una mujer obligada a ejercer un trabajo ilícito y radical; en minutos su ser da un giro de 180 grados. Por otra circunstancia igual de azarosa que la que la obliga a cumplir con la insospechada labor, adquiere poderes, memoria e inteligencia sobrenaturales, lo que desencadena una serie de sucesos que oscilan entre la violencia, el conocimiento y la consciencia de sí misma y su entorno.
Lucy es esta joven mujer, de mirada perdida pero amenazante, producto de un accidente que desborda en ella a la vez que sensibilidad extrema, vigor para dar con su objetivo dejando de lado la moral, mientras el tiempo corre en su contra. Encontrará al profesor Norman (Morgan Freeman), cuyo trabajo e hipótesis fundamental se confirman en ella: ¿Qué pasaría si usáramos el 100% de nuestra capacidad cerebral?
Se alude a la otra Lucy, la del eslabón perdido en la cadena evolutiva entre el simio y el ser humano como tal. Las homónimas tocarán la punta de sus dedos como símbolo del contacto con lo más distante: el mundo tal como lo conocemos junto a lo primitivo. No es casualidad que el género elegido por Luc Besson sea el femenino, pues la sustancia de la que está compuesta la droga que permite a Lucy su revolucionaria capacidad cerebral, es la misma que las futuras madres embarazadas producen en algún momento de su estado.
La fuente de la vida, la comprensión de las cosas, lo siniestro, la plasticidad del ser mujer y Lucy como la metáfora de todo esto. La complejidad y la simplicidad de la mano. Todo lo que hemos creado como humanidad no ha sido suficiente para hacernos más inteligentes, mucho menos más sabios, vivimos al borde de un abismo que nosotros mismos hemos trazado.
Estamos ante una película hollywoodense pero valiosa, visualmente atractiva, de ritmo Bessoniano, excelente actuación de parte de Johansson, excelente música y de final abierto, aunque pareciera lo contrario. Si esperas verosimilitud tipo ciencia dura, no es un filme para ti, pero si sabes hacer pactos ficcionales, si disfrutas las especulaciones, sobre todo las confrontaciones, y si te gustan los tropiezos con algo de sabiduría, entonces no te la pierdas.
Lucy (2014)
Dirección: Luc Besson
País: Francia
Largometraje: 90 min.
Guión: Luc Besson
Producción: Virginie Silla
Productora: EuropaCorp / TF1 Films Production / Universal Pictures
Protagonista: Scarlett Johansson (como Lucy)
Música: Éric Serra
Fotografía: Thierry Arbogast
Edición: Luc Besson
Distribución: EuropaCorp. Distribution (Francia)
Universal Pictures (Internacional)
Presupuesto: $40 millones de dólares
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