Caliche Caroma
Fue en el Cactux Gastrocultural donde Barrio Tingo celebró sus cuatro años de vida salsera, sobre la noche del jueves 2 de febrero descargaron el ritmo afrocaribeño y se armó la gozadera. Los once integrantes de esta tropical agrupación tocaron casi tres horas para festejar su cuarto aniversario. La gente bailó hasta el sudor, se consumieron chelas y mezcales, agua de jamaica con hierbabuena, todos dijeron ¡salud! por los músicos que seguramente cumplirán otros cuatro años guarachear para la raza.
Entrevistamos a casi todos los integrantes de Barrio Tingo, e incluso a un exintegrante, se nos escaparon un par, pero los llevamos en el corazón, nunca cambien. Pepe Pizano, encargado del Cactux, y quien también toca la guitarra con esta banda, nos invitó las chelas y los mezcales, según él para hacer una buena nota, pero no todo se puede en esta vida. Aquí les dejamos sus palabras en clave de 2-3, güiro de chacha y sólo de bongó, que siga la rumba.
Nico Villa, guitarra: Llegué al segundo año de que se habían formado Barrio Tingo. Yo siempre tuve el gusto por la salsa y los ritmos latinos. Algo diferente de este grupo es que tiene guitarra (que yo toco), es muy raro que haya una lira en otros grupos, nos apoyamos con ella para las bachatas, pero a la cumbia y la salsa le dan un realce, algo diferente, rico. Se siente sabroso y se nota en la gente que lo disfruta.
Omar Tinoco, trombón, voz: Le andamos echando todos los kilos al proyecto. Comencé con el reggae, ska, etcétera. La primera vez que toqué esta música me sentí identificado, principalmente porque mi familia es súper salsera, por allí inicia la espinita de tocar salsa y cumbia. Hace cuatro años y unos días nos juntamos y montamos “Llorarás” de Óscar de León. Han entrado unos, salido otros, parece equipo de futbol. Nuestra proyección no era para algo así, pensamos en algo pequeño, pero llegó gente con otros conocimientos, nos tocó estudiar un chingo, y ahora eso nos conecta con el mundo de la salsa. Muy satisfactorio estar donde estamos, en conexión con un público maravilloso y tocando con mis queridos amigos.
Max Jiménez, trombón: Tengo unos 3 años con Barrio Tingo. Al principio sólo eran trombón y trompeta, Arturo y Omar, luego me hicieron la invitación para reforzarla, al final se integró la otra trompeta (Irepan Barrera). Dos trombones y dos trompetas se tienen que trabajar con más empeño, ensayamos aparte de la orquesta para asegurar nuestra sección, y llegamos a ensamblar con los demás. Es una chambota, pero aquí están los resultados.
Irepan Barrera, trompeta: Justo se cumplió un año hace poco de mi llegada a Barrio Tingo, fue en un viaje a la playa, ya había hecho unas suplencias, y ahora estoy dentro de la banda. He estado escribiendo música para la orquestación, estamos montando algo de eso, lo cual me da mucho gusto. El año pasado fue muy grato para mí, este trabajo fijo con Barrio Tingo es algo muy satisfactorio, hacer lo que a uno ama no tiene comparación.
Arturo Domínguez Luna, trompeta: La pura sabrosura. Hace cuatro años fue nuestro primer evento en un bar conocido de Pátzcuaro. Así empezó la aventura, principalmente para explorar otros géneros y desarrollar la técnica de la trompeta, en mi caso. Y bueno, siempre las ganas y el gusto de hacer música con los amigos. Estamos en proceso de sacar mucho repertorio para cumplir con las necesidades de los bailadores y también haciendo música original.
Omar Marín, bajo: En marzo de 2023 cumplo un año con Barrio Tingo. Ha sido una de las dinámicas más padres dentro de una agrupación. Ya sabes que el bajo uno es la columna vertebral, tienes que estar bien preciso, y ellos me motivan a dar lo mejor de mí. Este grupo va muy bien. Algo que los caracteriza y que les ayuda bastante es que sean amigos, yo poco a poco he ido acoplándome a esta dinámica, tal vez porque ya soy más grande (risas), pero sé que estos chavos llegarán lejos, eso les auguro.
Henri Sterling, congas: llevo un poco más de un año con estos muchachos y la estoy pasando bomba. Es un proyecto bien completo, todos los instrumentos que requiere la salsa y la cumbia suenan al cien. Muchísimo repertorio que hay, mucho que aprender, sacamos una rola a la semana, cuatro al mes. Nos turnamos para proponer los temas, cada uno proponía uno, pero ahora queremos sacar canciones de cajón, ésas que a la gente le gusta bailar, en eso andamos.
Iván Morales, pianista: Formamos el grupo con Tino. Recuerdo que regresábamos de una tocada en la playa con Meketrefes, puse unas canciones de Héctor Lavoe, y se nos ocurrió hacer algo así, salsero. También comenzamos con Polo, que ahora ya no está, Omar, Arturo, y así nos hemos ido integrando a la gran familia salsera.
Polo Villa, exbajista: Yo tocaba con Iván Morales en Skautomatics y nos dimos cuenta de que la música latina venía con todo, así que armamos el grupo. Y mira, Barrio Tingo cumplió 4 años. No toco con ellos ya, pero vengo a escucharlos e invito a toda la gente a que los conozca, aquí en Cactux los jueves, a partir de las diez de la noche, no se arrepentirán.
Jocsan Ruiz, vocalista: Entre hace dos años, y desde el principio me arropó muy bien la banda. Barrio Tingo está funcionando, ahí la lleva, ahora el Cactux nos abrió las puertas, la gente está baliando. Todos somos amigos en este grupo. Estamos a gusto, gracias a Dios tenemos trabajo, la estamos pasando muy chido. Síganos en las redes sociales, los sábados en la Mansión Solís, y el jueves acá en Cactux, cada quince días en Bambú, avisamos por nuestras redes sociales. Vean el video de “Trucutú” y por acá andamos.
Escritor putrefacto que deja el alma en cada tecla, a veces es grasa esa alma. Ganador dos veces consecutivas del premio «Mejor dedícate a otra cosa». En su casa lo conocen como Panchito porque baila el cha cha cha. Quiere adelgazar, pero no puede.
