Caliche Caroma
En una celebración más del 4/20, veinte de abril de 2023, cuando mariguanos de varias latitudes consumen la hierba con énfasis en la despenalización, legalización, cultivo y consumo responsable, suceden cosas muy pachecas que no está de más comentarlas. Este es un toque y rol de acontecimientos, productos culturales y una que otra anécdota alrededor del cannabis, sativa o indica. Ya lo dijo Ramón Méndez Estrada en su poema “La canción del macizo”:
Y me pregunto, la mera neta me pregunto
cuándo, hasta cuándo, en una noche joven de la ciudad,
podré abordar a una linda muchacha por la calle
para decirle, con toda naturalidad:
Disculpe, ¿podría indicarme dónde encuentro
un expendio de mariguana abierto a estas horas, por favor?
¿Hasta cuándo?
Pachecoadvertencia: Es cierto que algunos sienten remordimiento, pachecos arrepentidos, se dan golpes de pecho porque tosen mucho, y la hacen de emoción con aquello de que “eres un eslabón más en la cadena del narcotráfico”, pero otras formas de consumo son posibles. Más allá del crimen organizado, o más acá, hay buena mota sembrada por manos sin sangre, acaso popó. En la agricultura, el que se come las mazorcas. Para no caer en los extremos, ni corridos belicosos, ni mucho menos Vicente Fox, que apendeja más que un ladrillazo en la cabeza. Generar comunidad de consumo: «Presta para andar igual». La voz en off: «Justo acaba de llegar el dealer eco friendly, a los fumes me remito mientras esto escribo, se puede mariguanear sin ser Caro Quintero ni uruguayo. No me acuerdo en dónde dejé las sábanas».
Notipacheca: Las coincidiencias asustan. En la serie de HBO Max que lleva por nombre Succession, el personaje Roman Roy (interpretado por Kieran Culkin) provoca la explosión de un cohete espacial, el artefacto de alta tecnología hace ¡pum! El chiste en llamas es pagado con dinero del patriarca y magnate Logan Roy. El explosivo incidente es provocado por Roman Roy, adelanta el lanzamiento para que coincida con la boda de su hermana Siobhan. El día de hoy, 20 de abril (4/20), estalló el Starship, nave gigantesca no tripulada por humanos (¿Laika?), que Elon Musk lanzó a través de su compañía SpaceX, dicho aparato es el más grande construido hasta ahora (¡yo la tengo más ídem que tú!). A pesar de lo sucedido, el millonario de la vida real consideró un éxito el fracaso, tanto como para invertir otros miles de millones para generar una combustión marca Troya. ¿Acaso no es mejor el humo de la mariguana?
Pachecomusical: El momento sonoro viene forjado como dos recomendaciones musicales, una para ahorita, y la otra para al rato. Mariguanoto, músico de Aguascalientes. Si se tuviera que pintar un cuadro con la música de Mariguanoto, lo que saldría serían un par lagartijas gigantes bailando con un joven hidrocálido con los lentes de caguama y canzoncillos blancos. Él mismo se considera como un “Navegador de Guayabas” . Perturbador, estupefaciente, pero al mismo tiempo hipnótico, se han escrito más de cien tesis de ciencias sociales sobre este artista, en licenciatura, maestría y doctorado. Están prontos a darse a conocer los Estudios Críticos de la Cultura Mariguanoto, en la Universidad Nacional Autómovil de Mariguanoto (UNAM). Hay una película donde sale Damían Alcázar, allí se expllica mejor lo que Mariguanoto hace.
La segunda recomendación pachecomusical se llama El Hombrecito, un colectivo de músicos oriundos de República Dominicana. El hombrecito fusiona los sonidos latinos, el rock y el funk con la poesía y otros cogollos literarios. Además, en sus conciertos en vivo, las artes visuales juegan un papel arroz para ponchar un cigarro. Las historias de las canciones de El Hombrecito hablan de luchadores que juegan basquetbol, pero por las noches son travestis que crítican a los gringos por güeros, en un momento de tensión se hacen los jitomatazos, el cine, la memoria y la nostalgia, etcétera de la digresión y el buen viaje con la Marilyn Monroe de Santo Domingo.
Pachecoliteratura: Primero, antes de que nos pongamos con los ojos muy rojos, hay que ir a leer a Juan Pablo García Vallejo, autor del Manifiesto Pacheco y activista de la mota mexicana, tiene un montón de textos en línea y se han editado varios libros de él en editoriales como Eterno Femenino y La Guillotina. En la poesía, junto con Ramón Méndez Estrada, infrarrealistas como Mario Santiago Papasquiaro son expertos en hacer cigarros de mota con las hojas de los libros de Octavio Paz. En la novela, una la más fumada sin fumar, Proceso a Faubritten de la escritora Marcela Del Río Reyes, editorial Aguilar, en donde una bomba, en lugar de matar, hace inmortales a las personas. ¿Juan José Tablada fuma mariguana? La verdad es que quién sabe, aunque su narrativa, poesía, apuntes de viajes, reseñas y críticas están llenas de semillas de cannabis. J. J. Tablada dedicó un texto a la Juanita que se llama “El Caballero de la Yerbabuena”, unos fumes:
En la más sincopada de las rumbas
Préndeme tu vacuna, oh mariguana,
Universalizando el incidente.
Pachecoaudiovisual: Montón de películas y series que la mariguana ha destruido, ¿qué nadie piensa en los niños? No caben pájaros con manos en las barbas de quien se cría con cuervos, ¿o cómo era? El show de Eric Andre (The Eric Andre Show), caos de tv de Adult Swim, conducido por Eric André, el mismo, pero con tilde y hachís que deboran Kitao Sakurai, Andrew Barchilon y Jeff Tremaine. Un irreverente e hilarante programa de corta duración con cinco temporadas y contando. Invitados (reales y ficticios) expuestos a la ignominia, intervenciones musicales y sangrientas, sketches que no respetan al prójimo, violentamente creativa, El show de Eric Andre es políticamente incorrecto, lo que pasa en este show, ¿qué pasa en este show? ¿Qué show? Disponible en HBO Max, patrocinador oficial, en YouTube están algunas recopilaciones y fragmentos. No recomendado para personas sobrias, obvias y con quistes pilonidales.
Pachecodespedida: El actual gobierno de Andrés Manuel López Ponchador, junto con los macizos de Morena, prometieron que habría mota en todos los jardines de la Nueva España, pero mintieron. Lo único verde son los soldados. Mejor no arriesgarse, fumen en sus casas, o en la calle, pero con mucha precaución y pipa, un rapidín de felicidad, una bacha para la buena racha, un dos tres por todos los intolerantes a la mota: «Es cultura». Todavía existen tatemas gubernamentales que consideran un logro esos incendios en donde queman toneladas de mota (¡qué pinche desperdicio!). Poco el avance del Frente Pacheco Columna por Dos, porque tienen alas para divagar, y las autoridades no autorizan la fumadera. Por eso el coro se une a la pregunta de Méndez Estrada: ¿Hasta cuándo?
Escritor putrefacto que deja el alma en cada tecla, a veces es grasa esa alma. Ganador dos veces consecutivas del premio «Mejor dedícate a otra cosa». En su casa lo conocen como Panchito porque baila el cha cha cha. Quiere adelgazar, pero no puede.
